Tuesday, May 09, 2006

Voy a perder la cabeza por tu amor

Capítulo 5 – En el que explicar es importante, pero más importante es darse cuenta de que no es posible.

Voy a perder la cabeza por tu amor, cariño. Vos, que por instantes milimétricos te acercás tan a tiempo que me dejás mirando el sol. Vos que te hundís en la textura del sol y no me dejás de calentar, siempre, a cada rato. ¿Cómo estás mi amor? Yo te lo pregunto tratando de saber la verdad y vos me mirás con ojos de sol, y me quemás. Me quemás hasta putearte, hasta odiarte de reojo, de arriba hacia abajo. No sabría explicar que sos cuando te relamo. Me sabés a miel antigua y jabón suave. Tengo ganas de conocer cada rincón, cada migaja y piedra de tu cuerpo, puta. Entonces se abre el telón. Ahí está Hotel, de pie, mirándome. Pero como estoy dirigiendo, puedo pautar lo que se me dé la gana. El tema es que nada de lo que pueda pasar me incentiva a dirigir a esas marionetas. Siento que todo esto que estoy escribiendo para explicar o dar a conocer una historia tan inexstente como la de Hotel y yo, no alcanza. Pero ni siquiera es darse cuenta de si alcanza o no. Sino que no es verdad el hecho de que haya existido una relación entre Hotel y yo. Primero porque Hotel no existe, es una invención de mi cabeza, de mi ser que quisiera conocer a alguien como es Hotel. Prefecta. Perfectamente puta. Perfectamente angelical. Sucia y perfectamente limpia y pura. Es perfecta, por eso no existe. Y yo, que ni siquiera sé quien soy, porque me lo cuestiono a cada minuto. Y pienso que este que estoy siendo ahora es sólo una partecita de mí. Claro que el decir que varios yo conviven en mí, es también decir que Hotel existe, porque existe para algunos de todos los yo que habito según el orificio por donde se lo mire. Volvamos al telón porque no tiene sentido seguir explicando.

Se acerca, le veo fuego en la mirada, me sonríe.
- Nada, tenía ganas de mirarte más de cerca.
- ¿Qué pasa?
- Ah.

El diálogo se invierte, o se mezcla. Cuando estoy cerca de Hotel, me produce todo tipo de desorientes. Me pierdo rápido. Todo en calma con ella, hasta que me jode con algún comentario. La odio en esos momentos, digo, me digo, ¿porqué sigo con ella si supuestamente me hace mal?Ah, ya sé. Voy a perder la cabeza por tu amor. Por tu amor hacia mí y los tipos que te miran por la calle cuando no estoy. Porque no puedo hacer otra cosa que perder la cabeza cuando sé que están imaginándote en sus camas o en sus baños o en sus barcos o en sus terrazas y balcones, cogiéndote.

Como yo hago con cada una que veo, con cada una que se me cruza. Aunque no tenga ganas la imagen viene y vuelve, se va y cambia, aparece. Aunque no me importen, aunque no las conozca, aunque no quiera verlas, aunque piense que las quiero tener una noche, aunque no sean vos, las imagino. A todas y cada una. Pienso que tenías que saberlo amor, aunque pierda la cabeza por tu amor. Amor.Es una pena no poder explicar, lo puta que sos, Hotel. Es una pena no poder explicar, cuánto me gusta eso, Hotel. Es una pena no poder explicar, como estás, mi amor.

1 Comments:

Anonymous Anonymous said...

fugaporelsol.blogspot.com is very informative. The article is very professionally written. I enjoy reading fugaporelsol.blogspot.com every day.
online payday loan
online payday loan

1:09 PM  

Post a Comment

<< Home